Es importante tener en cuenta el gran estigma con el que cuentan las personas que presentan un trastorno mental grave (TMG). Al debatirlo con las personas que asisten a Alusamen, reconocen que etiquetas despectivas como “colgao, flipao, loco, empanao” están a la orden del día y les afecta negativamente, pudiendo repercutir en su recuperación, el ánimo, la autoestima, las relaciones y el trato cotidiano en la mayoría de ellos.
Para trabajar con ellos, hemos realizado un taller y hemos podido conocer sus inquietudes, intereses, dificultades, etc. respecto al tema. El taller consistía en presentar el concepto de primera mano y compartir algunas experiencias y preocupaciones entre todos. De manera general, podríamos comentar que la mayoría sabe lo que es el estigma y ha tenido vivencias relacionadas con este.
La historia de Bruno ejemplifica bien lo que puede sentir una persona que es juzgada por la condición de sufrir un trastorno mental.
Una posible solución propuesta por aquellas personas que lo sufren, es el tener espacios en los que a personas que no sufren TMG se les ofreciera la misma información con la que cuentan ellos y que con esta, unido a sus testimonios, tuvieran la posibilidad de establecer cambios sociales.
También comentan la posibilidad de poder tener información necesaria para saber cómo actuar o comportarse en presencia de otras personas. Por último, hacen referencia a la necesidad y la importancia de recibir terapia para poder hacer frente a sus posibles problemas de comportamiento, también los relacionados con el estigma.
Sobre los autores:
Texto redactado por Juan Carlos y Andrea, voluntarios en Alusamen en el curso 2020-2021. Hemos decidido redactar acerca de este tema debido a la importancia que merece no solo el trabajo individual o grupal con los usuarios y usuarias, sino a nivel social el trabajo de comprensión y educación en salud mental para cada vez ir luchando más contra el tabú aún existente.