El taller de familias va dirigido a los familiares de personas con enfermedad mental severa, en el cual se ofrece la oportunidad de que cada familiar cuente su experiencia personal, pudiendo así identificarse con el resto de vivencias expresadas por otros familiares. Las familias no se preparan para afrontar su nuevo rol como cuidador de su familiar enfermo mental. El cuidado de un paciente mental conlleva un elevado coste emocional, físico y económico.
Nuestro papel no es aportarles la solución a sus problemas, sino ayudarlos a que encuentren sus propias respuestas. Buscamos, ante todo, mejorar la calidad de vida de los familiares, ya que, de esta forma, les será más fácil interactuar con el usuario enfermo. También perseguimos reducir su angustia y que, todos juntos como grupo, cada uno con sus experiencias, puedan dar respuesta a la incertidumbre que les rodea.
En el taller, es muy útil la técnica del espejo, la cual plantea que cuando el que atraviesa el conflicto es otro, resulta más fácil ver con claridad en qué consiste éste y, por lo tanto, hallarle una solución. De esta forma, al encontrar una respuesta al problema ajeno, generalmente lo estamos haciendo al nuestro propio. Dicha técnica facilita la racionalización de sentimientos como el egocentrismo, la negación, la rabia, el odio, las ideas irracionales, etc.
En resumen, perseguimos la mejora de alguna de las condiciones de los familiares. Esta mejora implica la movilización de elementos personales y relaciónales: sentimientos, actitudes, comportamientos y, asimismo, movilización y utilización de elementos externos: recursos materiales, técnicos y servicios.
Medio físico donde se reúne el grupo.
Sobre los autores:
El taller le impartimos dos monitores. Juan Ramón, psicólogo voluntario en ALUSAMEN y Noelia, estudiante de Psicología realizando las prácticas en la asociación.