La barrera invisible: Estigma en la Salud Mental

Es una realidad innegable el hecho de que en la actualidad, hay una serie de prejuicios y estereotipos que no se corresponden con la realidad de la población afectada por un trastorno mental.

Existe la creencia de que son individuos peligrosos, con mayor índice de criminalidad que la población que no padece un trastorno mental; Sin embargo, diversos estudios realizados sobre el tema ya demostraron que no existe una causa directa entre trastorno mental grave y crimen, por lo que los factores de riesgo para cometer crímenes son similares tanto en el caso de personas con trastornos mentales como en el de personas que no padecen estos trastornos.

Esta falsa creencia de peligrosidad relacionada a su trastorno, conduce al aumento de la exclusión social, impedimento del acceso a la vivienda y el empleo, autoestigmatización y que la persona afectada no busque ayuda por miedo a que se la etiquete.

Debido a todo lo mencionado con anterioridad, es importante informar y educar a la sociedad acerca de los mitos y realidades y concienciar en medios de comunicación o centros educativos con el objetivo de lograr una sociedad más inclusiva.

Con relación a la población afectada, es importante trabajar con ellos y ellas a nivel cognitivo las secuelas de esta discriminación, escuchar su realidad y darles el apoyo y herramientas necesarias para sobrellevarlo de la mejor forma posible.

 

Sobre la autora:

Belén González

Estudiante de Psicología clínica en la Universidad Cardenal Cisneros (UCM).

Fue voluntaria en el centro San Camilo (Madrid) en las actividades de ocio llevadas a cabo en favor de las personas mayores dependientes.

Actualmente interesada en el efecto del estigma en la población afectada por trastorno mental y sus consecuencias a corto y largo plazo.

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